Cerca del 50% del comercio exterior no minero-energético de Colombia pasa por el Valle del Cauca.
Cerca del 50% del comercio exterior no minero-energético de Colombia pasa por el Valle del Cauca.
Desde esta región se atiende al 75% del mercado doméstico, llegando a más del 65% de la población del país.
El Valle del Cauca ha sido una región privilegiada para las operaciones logísticas tanto de distribución nacional como internacional: cuenta con el principal puerto marítimo de Colombia en la movilización de carga no minero energética del país, un aeropuerto internacional, infraestructura vial de primera categoría que conecta de manera costo eficiente con el resto del país, y cinco zonas francas permanentes que brindan beneficios tributarios y arancelarios a todo el tejido empresarial con vocación exportadora.
Más del 30% de las importaciones nacionales ingresan por Buenaventura. El Valle atiende de forma costo-eficiente a los principales centros de consumo del país.
Por otro lado, la demanda de servicios de logística de frío ha aumentado debido al incremento en la exportación de alimentos como el aguacate hass y el limón tahití, así como la constante importación de otras frutas, verduras y hortalizas, de las cuales más del 60% ingresaron por Buenaventura.
También aproximadamente el 30% de las importaciones en carnes, pescados y embutidos se distribuyen en el interior del país desde esta región.
Este ecosistema logístico convierte al Valle del Cauca en un nodo clave para la atracción de inversiones en comercio exterior, transporte y servicios de valor agregado. La combinación de infraestructura portuaria, vial y aérea, junto con la creciente demanda de soluciones especializadas como la logística de frío, abre oportunidades para el establecimiento de centros de distribución, almacenamiento y transformación que fortalezcan aún más la competitividad de Colombia frente a los mercados internacionales.
